Estos últimos tiempos ando algo complicado de horarios, entre el trabajo, la universidad y parecidos, así que las agendas no me han dado mucho tiempo para dedicarme al viejo Café. Pero, para que no se ande diciendo por ahí que no paso un trapo por la barra, ni quito las telarañas del techo, ni lavo los vasos, ni nada, pues los dejo con una canción, más la promesa de traer algún texto digno lo antes que pueda (que haré lo posible porque sea esta semana). Ya lo saben, los gajes del oficio...
(Ya ven que no es cualquier cosa... y encima el título cae a pelo a la ocasión)
(Ya ven que no es cualquier cosa... y encima el título cae a pelo a la ocasión)
5 comentarios:
Me gusta esta canción...pero me gustan más otras versiones aunque no sean las originales (ésta lo es no??)
1besico!
Bullard,
BULLAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAARD¡¡¡
El macho cabrío de Perú, ostiaaaaaaaaaaaaaaaa¡¡¡
Ya te veo ya que vas de culo últimamente...ya somos dos...OSTIAAAAAAAAAAA¡¡¡¡¡
Esa copa, Santi, esa copa.
Fiona: Hay una versión aflamencada que es maravillosa, y versiones modernas en tango. Igual esta canción siempre será una maravilla.
Tripi: Eso, ya somos dos, jaja. Apenas si tengo tiempo para respirar, ya ves...
Usted a su ritmo, tómese tiempo. Otro temazo,otra copa que alzo.
Salud.
Pues salud, claro que sí.
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